Calor y lluvias podrían favorecer la propagación del Aedes aegypti transmisor del dengue
Si bien el cambio climático es un factor clave para la propagación geográfica del mosquito transmisor y del incremento de casos a nivel global lo más importante es hacer hincapié en las medidas preventivas, como la eliminación de las aguas estancadas en casas y jardines.

Este 2023 fue el año que tuvo la mayor cantidad de casos de personas con dengue según los registros oficiales siendo contabilizados más de 134.000 contagiados y 68 muertes en todo el país.
De los 46 países y territorios que notifican en América 43 tuvieron casos de dengue, y en ellos se reportaron 4.150.724 contagios confirmados desde enero a la fecha, según una publicación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) siendo desde 1980 el mayor número de casos que se haya registrado en un año, informando 2.025 muertes por dengue.
El cambio climático ha traído sequias e inundaciones en diferentes lugares de América pero sumado a ello un deficiente saneamiento y una ausencia de sistemas de salud concretos y efectivos han contribuido a un aumento de los casos y este conjunto de situaciones están provocando una mayor transmisión del virus sumando al agua almacenada y las fuertes lluvias que atraen a los mosquitos.
¿Cómo prevenirnos?
Si bien ya hay una vacuna contra el dengue todavía no se encuentra al alcance del público general y aunque tiene cierta accesibilidad a la gente aún está en manos del sector privado y ante el coste de la vacuna, mientras tanto debemos hacer prevención y cuidarnos como la limpieza dentro y fuera de las casas y, en especial, la eliminación de las aguas estancadas o acumuladas, descacharrando, cambiando agua de floreros y bebederos de mascotas, entre otras.